PORQUÉ VOTAR
Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución
Más allá de la Pandemia por la cual atraviesa la humanidad desde hace varios meses, para los venezolanos otra epidemia comenzó desde mucho antes.
El gobierno de Nicolás Maduro ha echado por tierra no sólo los avances que nuestra sociedad había alcanzado previamente en distintos ámbitos como educación, salud, seguridad alimentaria, ejercicio democrático, soberanía, reconocidos mundialmente, sino, lo que es peor, ya hasta las esperanzas parecieran disiparse; quienes gobiernan y quienes pretenden gobernarnos a partir de una intervención extranjera, nos han querido convertir, y eso es parte de un diseño, en un pueblo desesperanzado, un pueblo sin ánimos para luchar, un pueblo resignado a la entrega de sus recursos naturales, un pueblo resignado al deterioro aceleradísimo de los servicios públicos, un pueblo resignado a trabajar sin salario, sin capacidad de contratar su relación laboral, sin defensa sindical; un pueblo que necesita de la limosna para sobrevivir.
Por otra parte, el viejo enemigo de los pueblos que ya denunciaba el Libertador en 1829, el imperialismo estadounidense, ha encontrado, como nunca tan abiertamente, aliados internos que proponen directamente que seamos invadidos: Juan Guaidó y Leopoldo López, el llamado G4 y grandes empresarios con "nacionalidad" venezolana pero con espíritus transnacionalizados, llámense estadounidenses, rusos, chinos, europeos, turcos, etc. Espíritu y conciencia del gran capital.
De acuerdo a nuestra Constitución, aprobada soberanamente en 1999, la misma que el gobierno de Maduro se propuso cambiar, la misma que es reiteradamente violada tanto por Guaidó y el G4 como por el propio gobierno Maduro-Cabello-Padrino, está prevista una elección para la Asamblea Nacional que debería ocurrir y ya está anunciada para este próximo 06/12/2020. Aunque las encuestas de opinión indiquen un rechazo al gobierno que se ubica cercano al 80%, en el marco de las enormes restricciones que impone la pandemia y del control social que el gobierno ejerce y dado que la gente, el ciudadano común, tiene que emplear el poco tiempo disponible para movilizarse en la búsqueda precaria de alimentos y medicinas, tal elección representa, para la élite que gobierna, la opción menos desfavorable porque estima que un pueblo desmovilizado y además desmotivado puede ser manipulado por su maquinaria política y más cuando ésta dispone de los recursos del poder. De allí su interés en esas elecciones este mismo año. No es precisamente porque quiera cumplir con la Constitución que tantas veces ha pisoteado.
Sin embargo, tal como la historia venezolana y la universal han demostrado muchas veces, un plebiscito, un referéndum o unas elecciones en las cuales el verdadero pueblo se exprese mayoritariamente, masivamente, frente a observadores de todo el mundo para mostrar su rechazo tanto al gobierno como a los que planean una salvaje intervención estadounidense a nuestra tierra, puede constituir una demostración de fuerza democrática que, en plazos insospechadamente cortos, podría ser capaz de impulsar los cambios democráticos ineludibles que la sociedad anhela.
A comienzos de este mismo mes de julio, desde este espacio publicamos el documento titulado: "Acuerdo Pre-Electoral para Atender la Emergencia Social, votar para salvar la República"[1] un documento que, de nuevo, invitamos a leer y, que ahora, nos permite reafirmar el PORQUÉ VOTAR.
Votar porque este proceso electoral puede abrir una rendija democrática para rescatar la legitimidad y constitucionalidad de la AN. Un Poder, agregamos ahora, que abandonó su capacidad de ejercer la función constitucional de legislar y ejercer la vigilancia sobre la actuación de los otros Poderes Públicos. Un Poder que sólo puede recuperar su Autoridad y ascendencia sobre los ciudadanos si la gran mayoría de los electores visualiza y se hace parte de Otra Opción, no sólo de partidos sino de organizaciones sociales, que emerjan al margen del desgaste y repudio de lo que aún llaman "polarización", articulada sobre la base de una orientación de rechazo a cualquier tipo de Intervencionismo y capaz de consensuar un Acuerdo y Compromiso Pre-Electoral centrado en Medidas Urgentes dirigidas a abordar la Emergencia Social y Humanitaria que viven las familias trabajadoras y la inmensa mayoría de la población.
Votar con el propósito de recuperar condiciones y espacios de vida, que estimule la cualificación del Acto Electoral y promueva la Calidad del Voto como Acto Decisorio sustentado en el más amplio Acuerdo y Compromiso Electoral.
Votar porque nos permite, además de promover candidatos para cambiar la actual situación, apostar para que la participación ciudadana masiva en ese proceso se convierta en un Acto Refrendario contra los responsables de este desastre que han violentado la Constitución y colocado en peligro la República, la Población y su Territorio.
Votar porque creemos que nada ni nadie puede sustituir al pueblo organizado en la solución de sus problemas. Este desastre de país en caída libre solo puede reconstruirse por la voluntad decidida de su pueblo. Las elecciones parlamentarias son una oportunidad de mejorar las condiciones de lucha en la que nos encontramos, de impedir que sigamos cayendo en el abismo de la desesperanza. La tarea histórica que le corresponde a la nueva Asamblea Nacional que resulte electa, es la de propiciar, proponer, auspiciar, facilitar el diálogo nacional para enfrentar la gravísima situación del servicio de Agua Potable y Saneamiento en todo el país, la gravísima situación de la escasez de gas doméstico, la intolerable oscurana que se vive en el interior de la República por la falla estructural del Sistema Eléctrico Nacional, la gravísima situación de la falta de combustible que paraliza al país, la disolución del sistema escolar venezolano, la agonía del sistema de salud, y en general la debacle de la economía nacional.
Por todo lo anterior, NO PODEMOS ABSTENERNOS DE PARTICIPAR. La única respuesta posible es VOTAR; manifestarnos con el arma poderosa disponible del ejercicio de la soberanía popular a través del sufragio y la fuerza de la opinión pública, pero hacerlo en contra de quienes han causado el desastre en el cual nos encontramos: el gobierno de Maduro y el gobierno imperial de Donald Trump representado por el "Guaidoismo". Votar conscientemente, exigiendo garantías electorales y el respeto de la voluntad popular, evitando las provocaciones del gobierno y de los opositores abstencionistas que le hacen el juego, para evitar una participación electoral masiva que le haría tambalearse en el poder y le envié un mensaje al mundo de que los venezolanos somos un pueblo soberano. Hagamos de nuestro voto un ariete para abrir el camino hacia el cambio democrático y pacífico que nos permita salir del laberinto. Sí hay futuro, pero tenemos que luchar por él.
¡VOTAR CONTRA LOS CAUSANTES DEL DESASTRE ES CONVERTIR LAS ELECCIONES PARLAMENTARIAS EN UN REFERÉNDUM LIBERADOR!
¡ABSTENERSE ES DEJAR EL CAMINO ABIERTO PARA LA ENTREGA DEL PAÍS, PARA LA VIOLENCIA Y PARA LA DESTRUCCIÓN!
Héctor Navarro, Gustavo Márquez, Roberto López, Juan García, Esteban Emilio Mosonyi, Edgardo Lander, Oly Millán Campos, Santiago Arconada, Ana Elisa Osorio.
________________________________
[1] Publicado en diversos portales: https://www.aporrea.org/actualidad/n356984.html
Articulo leido aproximadamente 645 veces